Interesante. Cualquier cosa que uno pueda creer, Internet tiene algo para decirnos. Digo esto porque antes de leer el artículo que cito a continuación, creía justamente lo contrario. Hubiese apostado que era la madre la responsable de esto.
Un estudio realizado por la Universidad Estatal de Pennsylvania, Estados Unidos, reflejó que mientras más tiempo pasaban los niños solo con los padres, más alta era su autoestima y mejores eran sus habilidades sociales.
“El estereotipo de que los adolescentes pasan todo su tiempo metidos en su habitación o con sus amigos es, en realidad, tan solo un estereotipo”, comentó Susan McHale, directora del Instituto de Investigación de Ciencias Sociales en Penn State.
“Nuestra investigación demuestra que, ya entrados en los años de la adolescencia, los jóvenes continúan pasando tiempo con sus padres y este tiempo compartido tiene implicaciones importantes en los ajustes psicológicos y sociales de los adolescentes”.
Los investigadores advierten que el estudio no es representativo para todos, ya que las familias estudiadas son “casi exclusivamente europeas-americanas, de clase media trabajadora que viven en ciudades pequeñas, o en pueblos rurales”.
Se han escrito muchos artículos sobre los beneficios para los niños de pasar más tiempo en familia. Menores conductas delictivas y menos probabilidad de ceder ante la presión del grupo, son sólo algunas de ellas, sin embargo pasar más tiempo con el padre, demostró que trae beneficios claves para la autoestima y la “competencia social”, mientras que el tiempo compartido con la madre no mostró las mismas correlaciones.
“En las familias que cuentan con ambos padres, el papel de la madre como proveedora de los cuidados está tan bien ensayado, que su participación puede fácilmente pasar desapercibida y no reconocida”, señalan los investigadores.
El tiempo con el papá generalmente significa “bromear, molestarse, y otras interacciones juguetonas”, comenta el estudio. “Los padres, en comparación con las madres, se involucren más en las actividades de ocio y se relacionan más como “amigos” con sus hijos, lo cual es crucial para el desarrollo social de la juventud”. “¡Esto no quiere decir que las madres no son importantes!”, dijo McHale.
Un estudio anterior mostró que los niños que pasaban más tiempo con sus madres eran menos propensos a la depresión, lo que no estuvo presente en su relación con los padres.
¿Qué opinan ustedes de este estudio? ¿Creen que padres y madres entregan diferentes cosas a los hijos? ¿Están de acuerdo con lo descrito anteriormente? Nos encantaría conocer su opinión en los comentarios a continuación.
