Quedo buenisimo!!! Estoy feliz de poder demostrar lo que realmente me apasiona!! Muchisimas Gracias!!
A sus 23 años, repitió una reunión familiar 63 años después. Entrevista a Guillermina Chiodin.
- Por admin


La mayor satisfacción nos la dio llevar a cabo el 25 de septiembre de 2011, el Segundo Encuentro de la Familia Chiodin (el primero se celebro el mismo día pero del año 1949).
Hola! Me llamo M. Guillermina Chiodin Guimpel, vivo en Rosario (Santa Fe, Argentina), tengo 23 años y soy Técnica en Higiene y Seguridad Laboral pero lo que verdaderamente amo es la Historia y sobre todo la Genealogía.
Indagar sobre antepasados era algo que nunca me había planteado, hasta que en el año 2009 surgió el tema de “hagamos la ciudadanía Italiana”, fue allí donde emprendí la búsqueda que inconscientemente me llevo a esta gran pasión.
Empecé por mi línea paterna, los Chiodin, interrogando a mi abuelo, así de a poco comenzó a formarse el árbol con nombres exactos, perdidos y fechas aproximadas, dando por resultado una familia numerosa: Domingo o Domenico Chiodini (mi tatarabuelo) arribo a la Argentina, procedente de Italia el 23 de diciembre de 1882 y en 1886, aproximadamente, contrajo matrimonio con María Ragazzo, inmigrante italiana, dejando por descendía: 15 Hijos, 78 Nietos, 130 Bisnietos, 268 Tataranietos, 137 Choznos y 1 Bichozno que dan un total de 629 descendientes, sumándole esposas/os llegamos a cerca de las 1000 personas.
Inicié requiriendo partidas de nacimiento, casamiento y defunción, recorriendo Registros Civiles y Conventos, todo iba encaminado pero en el momento de solicitar el acta de defunción del “italiano Domenico” hubo complicaciones, ya que en los sitios que visitamos no figuraban datos del mismo. Ese día una vez solicitadas varias de las partidas y al ver el faltante de reseñas del italiano, decidí instintivamente dirigirme al cementerio de Timbúes (ex Colonia Jesús María, tierra destinada a recibir inmigrantes, donde Domenico y su familia se establecieron) en busca de indicios. Obtuve noticias de otros familiares pero de Domenico nada.
Paralelamente comencé por Facebook a agregar a “los Chiodin” que iba encontrando, así me contacte con una prima, M. Florencia Chiodin. Juntas intentamos continuar la búsqueda, completamos aun más el árbol y un día decidimos retornar al cementerio de Timbúes; ese día observamos lápida por lápida, tomamos fotos y notas.
En un momento iba caminando distraídamente y de golpe leo en una placa DOMINGO CHIODINI y a su lado María Ragazzo, fue tanta la emoción que pegue un grito de ¡Acá están! Pensar que siempre estuvieron ahí y la primera vez que fui me los pase por alto! Ya teníamos por lo menos fechas exactas pero lo más satisfactorio fue poder ver sus rostros en las placas.
Ese hallazgo me inspiro a recorrer otros cementerios de la zona (Capitán Bermúdez, Granadero Baigorria, San Lorenzo) mientras que otro primo, Gerardo Chiodin, transitaba otros más alejados de la ciudad. A todo esto gran parte de la familia seguía aportando datos mediante Facebook, mail y MyHeritage.
Otro gran aporte fue la Libreta de Familia de Domingo (otorgada por una nieta de Él). Al leer, me sorprendió la tapa que decía “Domingo Chiodini” en vez de Chiodin, ahí nació una nueva duda, el porqué de Chiodini y el origen del apellido ¿de donde era?, si nosotros especulábamos que era originario del Véneto por su terminación en N. Inclusive al admirar datos de Censos (1887 y 1895) encontramos que Domenico y su padre, Enrique, figuraban como Chiodini, pero el primer hijo del italiano figuraba como Chiodin, de allí en más fue arrastrado ese “error” de escritura hasta el día de hoy.
A raíz de ese desencuentro con el italiano, empezamos a charlar con la familia y surgió el rumor de que cierto día del año 1921 Domenico “salió” a comprar unas hectáreas de campo para repartir entre sus 15 hijos, no solo no las compro sino que fue asesinado y hallado sin el dinero.
No sabemos en qué ciudad o provincia tuvo origen este acontecimiento, ni si es mito o realidad.
Para poder desentramar este nuevo reto, recorrí hemerotecas en busca de algún artículo que relatara el homicidio e incluso esperaba hallar datos en las necrológicas de ese año. El resultado fue negativo y lo sigue siendo. Seguimos sin rastros de Domenico, de su lugar de origen e incluso del fallecimiento, pero no voy a bajar los brazos, esos tropiezos hacen que sea más emocionante la búsqueda.
La mayor satisfacción nos la dio llevar a cabo el 25 de septiembre de 2011, el Segundo Encuentro de la Familia Chiodin (el primero se celebro el mismo día pero del año 1949) Pusimos todas las expectativas en él y salió como esperábamos, eso sí, hubo ausentes pero con los presentes se intercambiaron anécdotas, historias, fotos y hasta bailes!
Les cuento estos hechos de “los Chiodin” porque son la rama de investigación más avanzada que poseo. Pude armar 18 carpetas (una por cada apellido tatarabuelo o apellido de bisabuelo en su defecto) con fotos, documentos, boletos de barcos, facturas de arrendamientos de campos,etc.
Los apellidos que forman parte de las mismas son: Belgani, Benassi/zzi, Biasutti, Bison/a, Bulfon/i, Cantoni, Chiodini, Cicuto, Costa, Curti, De Giuisti, Dall Aglio/Dellaglio, Guimpel, Padvalno, Paschetto, Ragazzo, Rizza y Zaccolo, por ahora. De cierta parte de ellos tengo otras historias como la de mi abuelo materno Gregorio Guimpel (Gimpel), ucraniano judío o ruso de nacimiento del cual solo tengo datos de su arribo al país, no poseo testimonio alguno ni fotos familiares pasadas y esto concluye en una nueva apuesta de investigación.
Soy usuaria de MyHeritage desde el 6 de Enero de 2010, o sea poco más de dos años.
El sitio resulta de mi agrado, desde el diseño, el dinamismo que surge al usarlo, las novedades y la enorme cantidad de opciones para interactuar dentro del mismo (reportes, gráficos y libros, Smart Matches, línea del tiempo, foros, encuestas y la parte de investigación o SuperSearch que es muy valiosa).
Rescato del software las mismas cualidades pero sobre todo la cantidad de campos personales a rellenar que hacen una descripción personal minuciosa y enfática de cada persona.
Hoy en día tengo 1125 en 370 familias en mi árbol genealógico, sin embargo faltan muchísimas más. Aun hay individuos sin identificación e incluso apellidos no desarrollados. Hay familiares en Argentina (mayoritariamente), España, Guatemala, Honduras y otros nacidos en EEUU, Rusia o Ucrania e Italia.
La herramienta Smart Matches es muy efectiva, en mi caso personal, me ayudó a conectar con un primo de la rama Delaglio (Dall Aglio) y así pudimos acoplar varios de los datos. A su vez, en mi caso, genera una expectativa al cargar nuevos perfiles ya que estoy a la espera de que aparezca el símbolo del Smart Matches verde parpadeando para investigar más sobre esa persona!
¿Alguna recomendación Guillermina para todas las personas que están leyendo tu entrevista?
Como aludí en un comentario, tengo un %50 de camino recorrido satisfactoriamente, mientras que la otra mitad es la más interesante y jugosa, sin embargo complicada.
Particularmente, está es la mejor parte, un desafío que sé que tarde o temprano resolveré. No me voy a detener en la búsqueda ni parar hasta llegar a la primera persona que dio origen a esta gran familia.
No se frustren al no dar en la tecla, imagínense lo aburrido que seria encontrar “todo de una”. El orgullo que uno siente al descubrir, hallar y reconocer historias, hechos, rostros y personas es impagable.
Investiguen, busquen, interroguen lo más que puedan, porque la satisfacción al encontrar algo nuevo es enorme! Y es algo que queda para la posteridad. Me olvidaba, lean mucho, les ayudara a comprender desde otro punto de vista la HISTORIA.
gylliam rojas acosta
agosto 22, 2012
que interesante mi tio ricardo acosta ruiz con unos primos logro algo parecido con toda la descendencia ruiz del corral logro juntar a 700 algo de descendientes y parientes estuvo muy bonita esta reunion a mi personalmente me gusta mucho este tipo de trabajo saludes a todos los fan desde costa rica