Juan en Perú ha descubierto hasta su descendencia familiar inca

María Antonieta Noboa Crawley Boevey, tiene en brazos a Juan Francisco Antonio Ballivián Noboa, a los pocos meses de haber nacido.

“…fabuloso mundo de la genealogía  que es impulsado e incentivado con esmero por Myheritage.es, al que agradezco sinceramente por la ayuda que presta a todos los que desean cultivar esta rama del conocimiento histórico”. Juan Francisco Ballivián Noboa.

En esta ocasión hemos recibido el increíble y muy completo relato de un usuario en Perú. Juan Juan Francisco Ballivián Noboa es usuario de MyHeritage.es hace un año y cuenta con 14.870 personas en su árbol familiar.

Juan ha llegado a recabar información de sus ancestros y ha descubierto que una rama de ellos proviene de España, específicamente de Galicia y además que tiene descendencia de una familia real inca. Invitamos  a todos ustedes a leer este muy interesante entrevista que le realizamos y que inicia con un muy hermoso relato acerca de uno de sus antepasados:

Las campanas repicaban. La Guerra del Chaco, que enfrentó a Bolivia y Paraguay, causando más de 90 000 víctimas entre ambas naciones, llegaba a su fin. Un joven soldado al que apodaban “juanacho”, conocido por sus acciones temerarias frente al enemigo y que lo tuvo frente a la muerte en varias ocasiones, tomaba una helada cerveza con una satisfacción desenfrenada.

«Noches y noches, en el ardiente Chaco, soñó y soñó, empuñando un gran recipiente con la helada bebida .  Aplacada su sed, no tardó en iniciar una nueva maratón de sueños, que lo impulsaban  a emprender imaginarias aventuras que lo llevarían a poseer un futuro rico en emociones y fértil en riqueza y oportunidades. Más la realidad se encargaba de dominar sus ilusiones. Bolivia quedó quebrada al finalizar la guerra y el país se sacudía políticamente con las aventuras golpistas y también los sueños de jóvenes oficiales para convertir a su patria en un país fuerte y respetado.

Esta foto fue tomada en la casa de Juan Misael Saracho, padre de Rosaura, ya viuda de Luis Ballivián, antes del viaje de Juan Ballivián, al Chaco donde se libraba una guerra contra el Paraguay.

Ingresó al Ministerio de Relaciones Exteriores, para iniciar la carrera diplomática que le permitiría viajar por el  mundo y conocer otras realidades.  Esta actividad lo atraía, pues su carácter jovial, extrovertido y amiguero  lo apuntalaba para una destacada labor en la no fácil tarea de fortalecer las relaciones de amistad con otras naciones. Fue así que llegó su primer desafío más pronto de lo que se pensaba. Fue nombrado Cónsul General de Bolivia, en el puerto de Mollendo, en Arequipa, Perú. Bolivia país mediterráneo por la fuerza, usaba el puerto peruano, para el embarque y desembarque de pasajeros que viajaban  a Europa, Estados Unidos de Norteamérica y tantos otros países, o que retornaban de ellos.

Fue durante el desempeño de sus funciones, que debió mantener una fluida relación con las autoridades peruanas del puerto y por ello el destino impuso sus designios. Era Prefecto del Puerto Don Arturo Noboa Velarde, hacendado del Valle de Tambo, también en Arequipa, el cual tenía siete hijas mujeres. Muy pronto y debido a los encuentros oficiales y luego privados, Don Juan José Ballivián Saracho, se enamoró de María Antonieta Noboa Crawley Boevey,  la quinta hija de Don Arturo. Fue así que el matrimonio llegó pronto y también el primogénito Luis Arturo, que nació en el mismo puerto de Mollendo, y se casó con la arequipeña Doris Cáceres Bellido.  Este nacimiento ocasionó que Doña María Antonieta sufriera una flebitis por lo cual su segundo hijo llegó seis años después.

La vida continua, y Juan José es trasladado a la ciudad de Arequipa, con similar cargo de Cónsul General de Bolivia. Allá nacieron su segundo hijo Juan Francisco Antonio  (quien escribe esta reseña) y Lourdes Marta Eugenia Ballivián Noboa,  que se casó con Mario Zalles Álvarez, segundo biznieto del Mariscal José María Agustín Ballivián Segurola, cofundador de la República de Bolivia. Su última hija, María Antonieta nació en la ciudad de La Paz y se casó con el arequipeño Gonzalo Soto Vargas Taylor».

Desde niño escuchaba los comentarios de mis padres sobre la genealogía de sus apellidos. Por lo Ballivián, no me llamaba tanto la atención, pues  en el colegio como en los libros que leía, existía mucha información sobre la familia por estar ligada a la historia de Bolivia, desde las  épocas coloniales. En cuanto a los Noboa, alguna vez escuché que muchas generaciones de ancestros, eran de Guayaquil, Ecuador y que los Crawley- Boevey, son de cuna inglesa y nobles.

Siempre tuve la inquietud de investigar más a fondo a mis ancestros. Inicié la tarea a una edad avanzada y gracias al maravilloso mundo de la Internet, obtuve no solamente un árbol genealógico sino también la historia de cada familia.

La tarea no es fácil especialmente al inicio. Se necesita mucha voluntad, perseverancia y disciplina. Es necesario recurrir a todas las fuentes posibles que se vaya encontrando, tanto de árboles  genealógicos de otros familiares o personas allegadas, libros con referencias a parientes, recurrir a los buscadores de personas, a los movimientos de pasajeros, de inmigrantes, en fin, echar mano a toda información posible.

Tener lo antes posible un árbol en línea, pues pronto recibirás mensajes o correos de personas que desean intercambiar información sobre tu investigación o también poder cruzar información con otras genealogías, tal el caso notable de la herramienta Smart Matches  de MyHERITAGE . No se debe olvidar a los parientes cercanos que aún viven y recurrir a ellos en lo posible, de estas fuentes se podrá obtener  información inédita, útil y hasta sorprendente.

He logrado con  mi trabajo tener a más de 20 000 familiares y ahora conozco muy bien la historia y parientes de cada uno de mis apellidos de sangre. En cuanto a los Noboa, el apellido procede de Galicia, inicialmente en Ribadavia y luego en Maceda. Es uno de los cuatro apellidos más antiguos de Galicia y la rama que se instaló en Guayaquil, procede directamente de Maceda e inclusive los mayorazgos continuaron en la ciudad ecuatoriana.

Escudo con certificación notarial de España

Uno de los Noboa Arteta se casó en Perú, formando la rama peruana de la cual desciendo. Los Crawley Boevey, efectivamente son una familia de nobles ingleses, los baronets de Barrow of Hygrove, emparentados con la familia Gibbs, de la cual también desciendo, y que a mediados del siglo XIX poseían la firma comercial más grande del mundo: Antony Gibbs & Sons, la cual operaba en 52 países, siendo sus mercados más importante, el  Perú , Bolivia, Chile y Brasil. En Perú se instaló la primera sucursal en Lima, luego en Arequipa, la cual fue dirigida por mi bisabuelo Octavius Charles Crawley Boevey y fue en esa ciudad que se casó con mi bisabuela María Francisca Murga y Murgia. La firma Gibbs tuvo el monopolio de la comercialización del guano peruano por varias décadas.

Hermanas Crawley Boevey Murga en Valparaiso Chile.

En Bolivia la situación fue similar pero con el salitre de Antofagasta y estuvo comprometida en el inicio de la Guerra del Pacífico, que enfrentó a Perú y Bolivia contra Chile, que invadió la costa boliviana como represalia por la implantación de un impuesto al salitre.  Son muchas las actuaciones de mi familia en acontecimientos que ya forman parte de la historia universal y es imposible resumir en este espacio a todas ellas.

Como hechos curiosos, tengo descendencia directa de la familia real inca, pues mi antepasado el Conquistador don Pedro Ladrón de Guevara, mi 12avo bisabuelo, uno de los primeros habitantes españoles en el sur peruano, se casó con la Palla Catalina Sisa Chimpu Ocllo, nieta del X Inca  Tupac Yupanqui, mi 14avo bisabuelo.  La familia Nieto y Quintanilla descienden del Conquistador Pedro, y yo de esta línea que llega a mi bisabuela María Francisca Murga y Murgia, casada con Octavius Charles Crawley Boevey. La nobleza inca y británica se unen a través  de mis ancestros.

Representación de los Incas

Termino este apretado resumen que lo hice con mucho entusiasmo para que los amigos de MyHeritage.es  lo publiquen y así, pueda contribuir en algo a enriquecer los conocimientos sobre el fabuloso mundo de la genealogía  que es impulsado e incentivado con esmero por Myheritage.es, al que agradezco sinceramente por la ayuda que presta a todos los que desean cultivar esta rama del conocimiento histórico.

Agradecemos a Juan por este maravilloso relato.