Jesús, lo has bordado!!
La satisfacción es inmensa cuando das con alguien que lleva tu apellido y vive en tierras lejanas, Argentina por ejemplo, les mandas una carta contando lo que haces y te responden diciendo que en vida de sus padres nunca preguntaron y que ahora les pesa no saber quiénes eran y de dónde llegaron sus ancestros.
Cuando les cuentas que tu los tienes a todos localizados y les ves la cara de felicidad … ese momento, ese instante, no tiene precio.
Eso sin ser familia cercana, porque cuando lo son, no hay palabras para describir lo que se siente.
Felicitaciones Jesús, y nos iremos viendo en el camino
Concha Pleguezuelo Rúbies
Desde la hermosa Granada, España, Jesús de Castro nos cuenta su historia como usuario de MyHeritage
- Por admin
“Me llena de un gran orgullo el haber podido llevar a mi padre al pueblo en que nació el suyo.”
Me llamo Jesús de Castro, soy de Granada, España y tengo 37 años.
Mi interés por la genealogía se debe, en menor parte, a algunos apellidos pocos comunes que tenían mis abuelos, y principalmente a las historias que mi madre nos contaba a mis hermanos y a mí desde pequeños.
Historias de postguerra en un pequeño pueblo de la provincia de Granada, o sobre meras anécdotas familiares, historias sobre sus abuelos que me dibujan a personas fallecidas décadas atrás y cuyos relatos despertaron en mí un interés por ahondar más en sus vidas y en quienes les precedieron.
Tuve la necesidad de saber no sólo meros datos personales, sino también el contexto histórico que les había tocado vivir, hambrunas, epidemias, en definitiva dibujar su vida.
Empecé mis investigaciones manteniendo charlas familiares, con el fin de dibujar “un esqueleto” de un árbol genealógico de pocas generaciones y aparte conseguir una colección de datos que, estaba seguro, de que otra manera sería imposible de obtener.
Proseguí mis investigaciones consultando registros civiles, archivos parroquiales, notariales, municipales, etc., si bien aún no he terminado dichas pesquisas, (y van cinco años ya), toda esta labor me ha permitido hacer un árbol genealógico que ha llegado hasta el s. XVII, en numerosas ramas de mi árbol, incluyendo no sólo mis antepasados directos sino también todas las ramas colaterales.
He tenido la oportunidad de descubrir en mis investigaciones la vida de personas que en su época fueron relevantes de alguna u otra manera y que el tiempo hizo caer en el olvido, sagas familiares dedicadas a la vida militar o a personas que en la actualidad son músicos, políticos, diplomáticos, etc., muchos de ellos conocidos de ámbito nacional.
Mi mayor satisfacción, aparte de conocer la vida de personas que nacieron siglos atrás, es poder aportar a mi familia, especialmente a mis padres, historias o aspectos de la vida cotidiana que desconocían sobre sus abuelos e incluso sobre sus padres, datos que a cualquiera de nosotros nos gustaría conocer.
Es curioso, desde muy joven siempre quise realizar mi árbol genealógico pero nunca me decidía a empezar, desanimado por la manera de organizar toda la información sin necesidad de tener que llenar una habitación de documentos y carpetas.
Por casualidad, en el 2007, alguien me enseñó el programa de MyHeritage y me pareció tan sencillo y visualmente atractivo, que ese mismo día ya estaba pidiendo datos concretos a mi familia sobre mis abuelos, bisabuelos, etc.
Como he dicho me encanta que sea tan sencillo y atractivo visualmente, lo cual ayuda mucho para no liarse con las filiaciones, poder buscar por localidades o por fuentes, publicar en línea, buscar duplicados en el árbol y un largo etc. Desde que uso el programa de MyHeritage se lo recomiendo a todo aquel que empieza en este apasionante mundo de la genealogía.
¿Se ha involucrado su familia en la investigación?
No toda la familia se ha involucrado pero si toda ha tenido interés de una manera u otra en el proyecto.
Algunos han aportado fotografías, otros una fecha de nacimiento o matrimonio y otros, simplemente, han querido que les envíe mis progresos. Algunos de estos familiares son miembros de mi sito en MyHeritage y pueden visitar el árbol que está publicado en la red.
He podido darme cuenta que el hacer un árbol genealógico es algo que a todo el mundo le gusta pero que sólo una minoría se decide a realizar y menos aun los que deciden investigar más allá de los bisabuelos, publicarlo en la red permite que muchas personas, al verlo, se decidan a empezar con su labor.
En la actualidad mi árbol genealógico cuenta con 13.546 personas, aunque no es una cifra definitiva, ya que como he dicho anteriormente mi labor no ha concluido.
La mayor parte de personas de esta cifra vivieron y viven en la provincia de Granada. A partir de principios del s. XX empiezan emigraciones a América por parte de algunas ramas de mi árbol, especialmente a Argentina, Brasil, Venezuela o Republica Dominicana, todavía no he investigado a los descendientes de estas personas pero todo llegará.
En los años 50 y 60 empieza la emigración en masa y tengo a numerosísimas personas que viven en todas las provincias de España y algunos países europeos como Alemania, Francia o Inglaterra; ¡algunos miembros de la familia llegaron a lugares tan lejanos como Australia!
Gracias a Smart Matches he podido encontrar algunas ramas familiares que ya daba por perdida la idea de encontrarlos, aparte de poder ampliar el árbol genealógico he podido establecer contacto con bastantes personas. Con los Smart Matches uno se da cuenta que cada vez más gente realiza la misma labor que tú, ayudándonos a muchos a encontrar a familiares o a personas que de otra manera seria muy difícil o prácticamente imposible.
Como anécdota puedo contar que, me ha pasado varias veces, he coincidido en alguna entrevista de trabajo o en la sala de espera del médico con personas desconocidas físicamente para mí, pero que al oír su nombre y apellidos he sabido que están en mi árbol genealógico y por lo tanto que somos familia, retirada eso si.
Me gustaría añadir que me llena de un gran orgullo el haber podido llevar a mi padre al pueblo en que nació el suyo, mi abuelo. Tras un tiempo de investigación pude localizar la vivienda y los lugares en que mi abuelo se había criado, donde su familia había trabajado, averiguar historias y recuerdos que los del lugar recordaban o habían oído alguna vez sobre mi familia paterna.
Todo aquello fue nuevo para mi padre, conocer aquellos lugares, oír aquellos relatos, sé que aún no lo olvida y por ello me siento orgulloso y es de las pocas cosas que realmente me emocionan.
¿Quisiera aconsejar algo a las personas que se inician en esta importante labor?
Desde aquí recomiendo al que quiera comenzar con la tarea de hacer un árbol genealógico o simplemente quiera conocer sus orígenes o pasado más reciente, que no desespere, con paciencia, constancia y tesón todo se consigue.
Esta no es una labor de un día, ni de una semana, hay que dedicarle su tiempo, el cual nunca es corto. Al final de tanto trabajo siempre llega la recompensa, y esta, es lo gratificante de encontrar tus orígenes, tu pasado, la historia de tu familia, que gracias a tu labor perdurara en el tiempo.
Jose Antonio Vega
junio 21, 2012
Me encanta esa historia, precisamente tengo una rama de mi árbol genealógico atascada en Loja, Granada.
Me gustaría contactar con el protagonista de la historia
Mi correo electrónico es jvegpez ARROBA hotmail PUNTO com