Oficios en extinción: Afilador

Oficios en extinción: Afilador

“El afiladoooooooooooooooooooooooooooooor” ¿Quién no ha escuchado alguna vez este anuncio en las calles? Precedida por una escala musical, que era interpretada con un pequeño silbato, esta llamada ha formado parte de los sonidos que habitan nuestras vidas desde hace décadas. Pero cada vez es menos frecuente escuchar o ver al afilador en nuestros pueblos o ciudades. Es otro oficio en extinción.

El oficio de afilador o amolador tiene varios siglos de historia a sus espaldas, con referencias a estos artesanos en pinturas del siglo XVII e incluso en un lienzo del pintor Goya fechado en 1790. Pero no hace falta echar la vista tan atrás: a día de hoy, es relativamente fácil encontrar todavía a uno de estos artesanos subido a una bicicleta o una moto en la que lleva montada una piedra de afilar.

El afilador, Francisco de Goya. Szépmuvészeti Múzeum,Budapest, Hungría

El afilador, Francisco de Goya. Szépmuvészeti Múzeum,Budapest, Hungría

Los afiladores, además de poner a punto cuchillos y otros objetos cortantes, también arreglaban las varillas de los paragüas e incluso parcheaban ollas y cacerolas. Y si nos remontamos a siglos pasados, cumplían una labor aún más importante: traían consigo las novedades de otros pueblos de la comarca cuando las comunicaciones no eran tan frecuentes.

Siempre dispuestos a compartir un rato de charla mientras hacían girar su rueda de afilar, estos profesionales ambulantes han sido una importante parte de nuestro paisaje rural o urbano y nos brindaban un servicio inestimable en los tiempos en los que nuestros utensilios no iban tan fácilmente a la basura.

Archivo General de la Nación Argentina 1870 Buenos Aires. Afilador callejero

Archivo General de la Nación Argentina 1870 Buenos Aires. Afilador callejero

Casi escucho de nuevo el sonido que anuncia al afilador… ¿y Ud. qué recuerdos guarda?

Comentarios

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  • María Mercedes

    junio 19, 2015

    Pues yo los sigo viendo por la calle y tocando el mismo silbido, lo que pasa es que la rueda lleva motor.