¿Qué es un censo? ¿Puedo encontrar ahí a mi familia?

¿Qué es un censo? ¿Puedo encontrar ahí a mi familia?

¿Conoces todo lo que los Censos y Padrones pueden revelar sobre tus antepasados?

Los primeros censos que se realizaron en España parten del siglo XI, pero a lo largo de la historia, infinidad de reyes y gobernantes encargaron en todo lugar la creación de listas de sus ciudadanos con el objeto de establecer los tributos y mantener un control demográfico de la población para diferentes motivos: sanidad, militar, social, económico…

Los agentes nombrados por la autoridad correspondiente en cada caso recorrían las poblaciones y llamaban a cada casa para recabar los datos de sus ocupantes, relaciones familiares, trabajos, posesiones… y con toda esa información se elaboraba el censo.

¿Y qué es un padrón? Se trata de una lista creada por la administración municipal para tener constancia de quienes residen en el lugar y desde cuando. Un uso común de los padrones municipales es el de confeccionar las listas de votantes.

A pesar del interés genealógico de ambos registros, hay que reconocer que la inmensa mayoría de nosotros, cuando nos iniciamos en la historia familiar y tras crear un árbol genealógico gratuito en MyHeritage a modo de primer paso, solemos limitarnos a incorporar la información que ya conocemos previamente y, como siguiente acción, buscamos los registros de nacimiento, matrimonio y defunción.

Los censos: busca un poco más allá

Es verdad que los que hemos mencionado son pasos necesarios y que por lo general dan muchos frutos. Pero cuando hemos extraído todo lo que hemos podido de los registros más habituales, llega el momento de pensar en consultar otras fuentes. Afortunadamente, MyHeritage cuenta con cientos de millones de registros en archivos y colecciones de todo tipo.

Una excelente idea es continuar nuestra genealogía rastreando los padrones y censos de nuestros familiares. Tienen varias particularidades que los hacen muy interesantes, de modo que no los pierdas de vista. ¿Sabes cómo buscar en ellos?

En realidad, es muy sencillo: necesitas saber dónde y cuándo vivía un familiar concreto. Pero si no eres tan afortunado como para conocer estos datos de los antepasados que quieres localizar, nuestro potente motor de búsqueda acudirá en tu rescate.

El camino más corto

Comienza tu búsqueda en la página web yendo al menú de la derecha de la pantalla donde dice Investigación. Si seleccionas en su menú desplegable la opción Registros del Censo, aparecerá un formulario de búsqueda que se centra en este tipo de documentos.

La búsqueda puede ser más o menos precisa, según la información que tengas y tus propias necesidades. Salvo que estés muy seguro de los datos que ya conoces, no marques la casilla de Coincidencia exacta de todas las condiciones o puedes dejar pasar información importante que esté mal transcrita o que tú ya tenías pero con errores.

Otra forma alternativa de buscar es la de navegar entre colecciones. En el mismo menú Navegación está disponible la opción Catálogo de la Colección. La pantalla resultante muestra una columna a la izquierda en la que podrás discriminar qué tipo de colecciones buscas, en qué continente, país, rango de años, etc. MyHeritage tiene 227 colecciones de Censos y Padrones de todo el mundo que contienen un total de ¡1.699 millones de registros!

Más de once millones de nombres en estos archivos pertenecen a España. Puedes buscar en censos y padrones de Aragón, Galicia, Navarra, Andalucía, Murcia… Al seleccionar una de estas colecciones aparecerá un formulario similar al anterior pero ya filtrado para esos documentos. La búsqueda funciona de manera similar.

Ni que decir tiene que los miles de millones de registros que forman la base de datos de MyHeritage aparecen en cualquier búsqueda genérica que hagas. Es decir, que si utilizas la opción Busque todos los registros del menú Investigación y los datos introducidos forman parte de una colección de este tipo, aparecerán también listados, con un enlace que te llevará hasta ese archivo.

¿Qué te revelan los censos y padrones?

Aunque los datos que contienen este tipo de archivos pueden variar, lo habitual es que figure el nombre completo, la edad, el domicilio y otro tipo de datos como su nivel de estudios, profesión, etc.

Pero, sin duda, lo más interesante de encontrar antepasados en un censo o padrón es la posibilidad de relacionarlos con otros familiares. Por ejemplo, tal vez conozcas el nombre y apellidos de un tío bisabuelo y el listado del censo te aporte los datos de su esposa y sus hijos junto a otras pistas que abran más caminos en tu investigación familiar.

Saber con quienes vivían tus antepasados puede ser una fuente muy valiosa para conocer nombres y edades de sus hijos o incluso, como ocurre con frecuencia, toparte con familiares con los que no contabas en principio, como una hermana que convivió con el matrimonio durante un tiempo, sus padres…

De ahí que toda investigación familiar deba llevar un orden, como hemos mencionado en otras ocasiones: recoger datos e información entre nuestros familiares, contrastarla y documentarla en la medida de lo posible, introducirla en nuestro árbol familiar e iniciar así la apasionante aventura de buscar lo más desconocido para seguir añadiendo: registros vitales, censos, padrones… ¡es la etapa más apasionante y en la que seguramente iremos descubriendo un montón de sorpresas!